Vampire: Prince of the City

De la editorial: "Desde tiempos inmemoriales, los Kindred -vampiros- han acechado sin ser vistos por las masas mortales a las que depredan. Su mundo está gobernado por el Príncipe, el más poderoso e influyente de los Kindred de la ciudad. La palabra del Príncipe es inviolable y sus acciones incuestionables. Sin embargo, el Príncipe ha muerto y su legado no es más que cenizas. El manto del liderazgo debe recaer en otro Kindred residente en la ciudad � uno de los Primógenos, el consejo gobernante que normalmente apoya y aconseja al Príncipe en sus decisiones y juicios. La competencia será feroz, y sólo los Kindred más astutos e ingeniosos prevalecerán. Se harán tratos, se forjarán alianzas y se romperán acuerdos. ¿Tienes lo que hay que tener para convertirte en el nuevo Príncipe de la Ciudad?

El objetivo del juego es sencillo: Conseguir más Prestigio que cualquier otro jugador para que te declaren el nuevo Príncipe. El Prestigio se gana controlando áreas del tablero que se definen como reinos de Influencia mortal. Cada categoría se divide a su vez en zonas, y algunas zonas son más prestigiosas que otras. Gana aún más prestigio resolviendo eventos que afectan al mundo de los Kindred, o implementando varias estrategias que te dan una ventaja única sobre tus oponentes. Lo más problemático es que el prestigio puede perderse y también ganarse: si te superan, puedes llegar a ser notorio. En el proceso de construir tu prestigio, puedes adquirir recursos o desafiar directamente a tus oponentes para obstaculizarlos o enviarlos al letargo. También debes llevar la cuenta de tu Sangre, que se va consumiendo a medida que pasan los turnos de juego y que gastas para activar los poderes de Disciplina. La Influencia, los Recursos, la Estrategia y la Sangre son las monedas de la vida de los Kindred, y por lo tanto son todas ellas fichas de negociación que podrás utilizar en el camino hacia la victoria final.

Prince of the City está diseñado para tres a cinco jugadores, cada uno de los cuales representa a un clan diferente de Vampire: El Réquiem. De complejidad moderada, el juego requiere estrategia, táctica, diplomacia y astucia para tener éxito. Una serie de reglas opcionales y avanzadas proporcionan aún más estrategia y valor de rejugabilidad para los jugadores más experimentados.

Creado siguiendo el modelo de los mejores juegos de mesa europeos, la caja de El Príncipe de la Ciudad contiene todo lo necesario para jugar, incluyendo un tablero a todo color con ilustraciones de la ciudad, un libro de reglas que describe cómo se juega, un mazo de cartas (Eventos, Recursos y Estrategia), cinco dados de 10 caras, cinco miniaturas y una serie de fichas y fichas.