Sheepland

Sheepland está ambientado en la hermosa isla del mismo nombre, donde durante siglos la población ha cuidado de las ovejas. Mientras trabajan inexplicablemente en el mismo campo, de dos a cuatro pastores intentan mover las ovejas a las zonas adecuadas para conseguir puntos. Durante un turno, debes realizar tres acciones, elegidas entre estas posibilidades:
- Mover a tu pastor
- Mover una oveja
- Comprar una loseta de terreno

Debes mover a tu pastor al menos una vez durante tu turno, y no puedes realizar la misma acción dos veces seguidas sin mover al pastor entre ambas acciones.

Hay seis tipos de terreno diferentes, con cinco losetas de cada tipo y costes crecientes (de 0 a 4 dinares). Cuando compras una loseta, no estás reclamando un terreno en el tablero de juego, sino que inviertes en ese tipo de paisaje, ya que es donde esperas que acaben pastando las ovejas. Al final de la partida, se anota 1 punto por cada loseta de un tipo de terreno por cada oveja que se encuentre en una región de este tipo; también se anota por las monedas que se tengan en la mano.

El mapa del tablero de juego muestra regiones separadas por carreteras: tres regiones de cada tipo de terreno para un total de 18 regiones. A lo largo de los caminos hay paradas de descanso numeradas, cada una de las cuales se encuentra exactamente entre dos regiones. Los pastores se mueven de un área de descanso a otra, el primer movimiento es gratuito y todos los demás en el mismo turno cuestan 1 moneda. Cuando compras un terreno, puedes comprar la ficha superior de cualquiera de los dos tipos de terreno junto a tu pastor. Cuando mueves una oveja, mueves una oveja de una región adyacente a tu pastor a la otra región adyacente a esa pieza, es decir, llevas a la oveja al otro lado del camino a un pasto más verde – bueno, más verde para ti, si todo va bien.

Cada vez que mueves al pastor, colocas una valla en el descanso desde el que empezó a moverse, haciendo que ese lugar quede inaccesible durante el resto de la partida. Durante la partida, algunas regiones se vuelven inaccesibles y, si están llenas de ovejas, se produce una carrera por las baldosas. La única oveja negra de la partida, que vale dos puntos, sirve como elemento semial azaroso, pudiendo desplazarse a una región adyacente en cada turno y, al mismo tiempo, siendo movible por los pastores mientras no esté cercada.

Después de que se hayan colocado veinte cercas, se termina la ronda de manera que todos los jugadores tengan el mismo número de turnos, y luego se cuentan los puntos.