Ragami

En todas las culturas existen personajes míticos que protegen a las personas y las ayudan a resolver sus problemas. Esos personajes suelen adoptar la forma humana con alas y los llamamos Ángeles de la Guarda o RAGAMI.

En este juego, cada jugador interpretará el papel de un RAGAMI, con forma humana alada, que viaja por el interior de una ciudad -el tablero-. En esta ciudad, siempre hay personas con problemas, con sus propios conflictos internos, que necesitan su ayuda. También hay hombres santos y demonios que pueden ayudar o oponerse a resolver estos conflictos.

El objetivo del juego es conseguir el mayor número posible de Puntos de Virtud (PV). Hay varias formas de conseguir VP, y en consecuencia hay varias estrategias que uno puede seguir para ganar el juego: resolver conflictos, hacer desaparecer demonios, ayudar a otros RAGAMI, ser el RAGAMI que ha resuelto el mayor número de conflictos, etc.

Pero ayudar a la gente a resolver sus conflictos es lo que vale más VP, y para ello necesitas tener Puntos de Fuerza. Tantos como la fuerza del conflicto que intentas resolver, que puede ir de 1 a 6. Hay varias formas de conseguir Puntos de Fuerza: cubos blancos, cartas, santones, la ayuda de otro RAGAMI, o un dado.

Existen Dados de Acción (que permiten ejecutar un determinado número de acciones, y su colocación la hará el último jugador en el orden de turno) y hay Cartas de Acción (que se pueden adquirir durante la partida). En su juego, el jugador puede realizar una de las siguientes acciones: mover su RAGAMI, mover los santones y los demonios, recoger cartas o resolver conflictos.

El juego termina en el turno en el que los lugares de los conflictos terminan o cuando un jugador alcanza la marca de 30 puntos.

Juego para 2 a 4 jugadores, 10 años en adelante, 60 - 90 min.