Oros

El Sabio, guardián inmortal de la sabiduría y el conocimiento, ha enviado a los semidioses dotados de poder para mover la tierra a los confines de la humanidad. En Oros cada jugador actúa como uno de estos semidioses. Deben instruir a sus Seguidores en la sabiduría de las montañas mediante el estudio, el culto y la experiencia. Y sólo en las alturas de las montañas pueden conocerse los mayores misterios.

Oros es un juego de estrategia de acción y economía, de colisión de losetas, de erupción de volcanes, de creación de montañas y de recogida de sabiduría. En los tapetes individuales de los jugadores, éstos mueven a sus Seguidores entre espacios de acción, lo que les permite manipular un entorno compartido como un gigantesco rompecabezas de placas tectónicas. Los espacios de acción permiten a los jugadores desplazar filas de tierra, mover y colisionar losetas de tierra, formar y hacer estallar volcanes, rendir culto para obtener sabiduría, viajar con sus Seguidores por el siempre cambiante paisaje y construir lugares sagrados de estudio y culto en las montañas. Construir lugares sagrados y rendir culto en ellos aporta sabiduría, que se utiliza para mejorar las habilidades disponibles en cada espacio de acción. La sabiduría también se utiliza para mejorar el valor del final del juego de cada lugar sagrado construido, así como para alcanzar otros objetivos que valen puntos del final del juego.

Cuando se construyen lugares sagrados, los semidioses del Sabio ascienden a un zigurat que actúa como temporizador hacia el final del juego. Cuando uno de ellos llega a la cima, los jugadores terminan la ronda y luego cuentan con una puntuación final.

En el núcleo de Oros está la capacidad única de cambiar, mover, construir, erupcionar y reposicionar la tierra dentro de un entorno de juego infinitamente conectado. Esta mecánica convierte cada acción en un rompecabezas de resolución creativa de problemas, pensamiento abstracto y una estrategia en constante evolución. Otro aspecto principal del juego es el tapete del jugador, que utiliza una mecánica mínima de colocación de trabajadores para gobernar las oportunidades de acción. El tapete también mantiene una economía de acciones que evoluciona de forma diferente para cada jugador a medida que invierte su sabiduría adquirida en una variedad de mejoras de acción. Debido a estos aspectos centrales, hay docenas de estrategias que los jugadores pueden explorar, y cada partida se desarrolla de una manera diferente, aunque competitiva.

—descripción del diseñador