Opera

En 1607 se estrenó en todo el mundo la ópera La Favola d’Orfeo, de Monteverdi. A lo largo de los siglos siguientes, Europa fue conquistada. En el juego de mesa Ópera, los jugadores llevan la Ópera al público. En Venecia, Viena, Berlín, Londres, París y Milán surgen grandes teatros de ópera. La ópera lleva a los jugadores a través de los períodos del Barroco, el Clasicismo y el Romanticismo. La música épica de seis famosos compositores Händel, Monteverdi, Mozart, Beethoven, Wagner y Verdi llevarán al público a sus teatros de Ópera.

La elaboración de un presupuesto inteligente es esencial para obtener el control y ser el dueño de su propio éxito. En cada ronda los jugadores determinan su nivel de presupuesto para influir en el orden del juego y activar los personajes del mismo. Los jugadores construyen nuevos teatros de ópera, buscan nuevas óperas de compositores populares e intentan ganar dinero. A veces optan por cobrar en el Palazzo, donde la Signora les paga bien, pero a largo plazo la música es uno de los fundamentos clave para construir su imperio. El elegante Maestro lleva la interpretación de una Ópera a un nivel superior y el Crítico puede hacer o deshacer a un compositor. No sobrevalores las tres rondas de recuento con valor progresivo, porque una aparición bien programada del Esperto podría darte la victoria en la Ópera. Los ducados y la capacidad son elementos clave para facilitar el crecimiento de tu imperio e influencia, pero al final la riqueza es sólo un instrumento para alcanzar fines más elevados.

En Opera los jugadores deben planificar bien. Introducir un Intermezzo de vez en cuando puede ser útil para tomar la iniciativa en un momento decisivo de la partida. La Ópera se desarrolla a lo largo de 9 rondas de juego, divididas en 3 episodios. Cada episodio consta de tres rondas de juego y una ronda de recuento. El jugador con el mayor número de puntos de victoria tras la tercera y última ronda de recuento será el vencedor.