Bootleggers

Es enero de 1921. La Prohibición lleva un año en vigor y parece que la 18ª Enmienda ha llegado para quedarse. El problema, sin embargo, es que la prohibición de la "fabricación, venta o transporte de bebidas alcohólicas" no ha hecho nada para reducir la demanda de alcohol. El resultado es que los alambiques ilegales salpican el campo y los bares clandestinos secretos (o no tan secretos) aparecen por todas partes en ciudades grandes y pequeñas. Las fuerzas del orden locales pueden hacer la vista gorda (sobre todo si están bien motivadas), pero los G-Men de Elliot Ness son más difíciles de convencer. Con tanto dinero en juego, el crimen organizado seguro que se interesa.

En Bootleggers, los jugadores asumen el papel de jefes emprendedores que buscan hacerse un nombre en el comercio ilegal de alcohol en plena era de la prohibición de 1920. El engaño, las mentiras y las alianzas de conveniencia son la norma, ya que los jugadores intentan controlar la distribución a través del dinero y la corrupción, presionando a la competencia, pagando a las autoridades locales, construyendo bares clandestinos y enviando camiones de alcohol.